Cualquier persona puede solicitar factura electronica

Facturación electrónica
A partir del 27 de noviembre de 2020, la facturación electrónica será obligatoria para los emisores de facturas. Las excepciones a la obligación (por ejemplo, en el caso de pedidos directos de hasta 1.000 euros sin IVA) se rigen por el artículo 3 (3) del Reglamento sobre facturación electrónica (E-RechV).
El E-RechV del Gobierno Federal obliga a la administración pública a recibir facturas electrónicas y a los proveedores y prestadores de servicios del Gobierno Federal a enviar facturas electrónicas en el ámbito de los contratos públicos. La E-RechV regula los plazos, métodos de transmisión, normas de datos y excepciones al intercambio electrónico de facturas.
E países de facturación
Cada vez son más las empresas que reciben de sus clientes la petición de enviar facturas electrónicas. En principio, la solicitud de facturas electrónicas significa que la factura en papel que envía por correo postal, o la factura en PDF que envía por correo electrónico, ya no es suficiente. Por supuesto, usted quiere mantener una buena relación y satisfacer rápidamente la petición de su cliente, pero ¿cómo hacer para que sus facturas salientes sean electrónicas?
Cuando se empieza a leer sobre facturación electrónica y los distintos formatos de factura electrónica, las opciones pueden resultar abrumadoras. Cuando decida qué software utilizar, la elección debe garantizar que sus facturas podrán convertirse al formato correcto. En otras palabras, asegúrese de que los formatos que necesita son compatibles y de que todo se ajusta a las normas locales y del sector.
Tenga en cuenta que esta elección se deriva de sus objetivos personales de facturación electrónica, o de lo que quiere conseguir con ella. Los formatos más habituales son XML, UBL, UN/CEFACT, XBRL y EDI, pero sus clientes y proveedores pueden tener otras preferencias.
Facturación electrónica obligatoria
Una factura electrónica transmite electrónicamente los datos de la factura y puede recibirse y procesarse de forma automatizada. El proceso está totalmente digitalizado, desde la creación de una factura hasta su pago. Una factura electrónica presenta la información de la factura en un archivo de datos estructurado y legible por máquina, en lugar de en papel o en un formato de diseño fijo como un archivo PDF.
Una factura electrónica es la información de una factura que se transmite electrónicamente y se recibe y procesa automáticamente. Una factura electrónica facilita la transmisión y el tratamiento coherentes y automatizados de la información de la factura, desde su presentación hasta el pago.
Una factura electrónica proporciona el contenido de la factura en un conjunto de datos estructurado y legible por máquina, en lugar de en papel o en un archivo de imagen como un PDF. Esto garantiza que la información facilitada en este formato por el emisor de la factura pueda ser:
El reglamento federal sobre facturación electrónica regula el envío de facturas electrónicas por parte de los proveedores a la administración federal. En cambio, la base de la facturación electrónica en los Estados federados alemanes es la Directiva 2014/55/UE de la UE, cuya aplicación compete a los propios Estados federados.
Facturación electrónica
La facturación automatizada y digitalizada es indispensable en tiempos de digitalización. El paso de las facturas en papel a la facturación electrónica permite reducir los costes en un 80%. Además, permite ahorrar en personal, tiempo y materias primas y reducir al mínimo los errores.
Pero, ¿cómo funciona la facturación electrónica? ¿Qué retos conlleva? Para las pequeñas empresas, por ejemplo. ¿Qué hay que tener en cuenta y qué son PEPPOL y ZUGFeRD? Son términos con los que uno se encuentra pero que dejan mucho sin explicar.
Una factura electrónica es una factura que se emite, envía y recibe en formato electrónico. Una factura electrónica, al igual que una factura normal, tiene la misma validez y contenido que una factura en papel. Una factura electrónica puede representarse y enviarse en diferentes formatos de datos.
Las facturas todavía se imprimen en papel, se meten en sobres, se franquean y se envían con un franqueo costoso, para que los destinatarios las introduzcan digitalmente en su sistema antes de poder pagarlas. Sobre todo, este procedimiento manual cuesta dinero, tiempo y trabajo.